viernes, 21 de junio de 2013

SOBRE LIBELULAS. Significado mitológico, simbólico, esotérico

Cuando el hombre empezó a fundar sus ciudades cerca de los ríos las libélulas ya habitaban allí.

Las grandes civilizaciones convivieron de cerca con estos insectos que pasan la mayor parte de su vida como larvas bajo el agua y que vuelan sólo cuando han alcanzado la fase adulta.

Las libélulas influyeron notablemente en el hombre y su cultura.

Ya sea por sus dotes curativas, alimenticias, su comportamiento o su aspecto físico, a las libélulas se les atribuye el don de ser portadoras de la buena fortuna.

EMBLEMA DE LOS SAMURÁIS
Los samuráis, antiguos guerreros japoneses, las utilizaron como emblema y símbolo de buena suerte. Eran llamadas kachi-mushi, es decir, insectos victoriosos.
Se dice que el emperador Yuryako Tenno cazaba en la llanura de Yoshino cuando fue picado por un tábano. Una libélula deshizó al tábano y el emperador quedó tan agradecido que bautizó a la región con el nombre de Akitsu-no, es decir, llanura de las libélulas.
De ahí surgió el antiguo nombre de Japón: Akitsu Shima o las Islas Libélula. También figuran en la poesía y canciones de cuna japonesa.

EN EL MÉXICO PREHISPÁNICO
En el México prehispánico se les consideró como símbolo de la pureza del agua. 
Aparecen en el arte pictórico teotihuacano dentro del Tlalocan, paraíso del dios Tláloc y signo ideal para aquellos hombres del rudo altiplano mexicano.
En la escena se observa a Tláloc, dios de la lluvia, en un lugar de cantos, juegos y deleites acuáticos entre mariposas y libélulas que revolotean a la orilla de ríos turbulentos bordeados de arbustos de cacao, flores y plantas de maíz.
Por otro lado, algunos las relacionaban también con entes malignos. Una descripción virreinal de la mitología náhuatl hace referencia a las libélulas de la siguiente forma: 
“Como era uno de los demonios tzitzimime, adoptó la forma de insecto, pero a pesar de ello en forma adulta tiene las garras y dientes protuberantes como una reminiscencia del cipactli o monstruo de la tierra (Spence, 1923″).
Robelo, en su diccionario de mitología nahoa, traduce tzitzimime como flecha o dardo que vuela. Algunos cronistas como Sahagún traducen “tzitzimitl” por diablo, demonio habitante del aire, mientras que otros los consideran en general como monstruos con grandes mandíbulas o fieras que habían de bajar del cielo para comerse a los hombres al final del mundo.

MITO DE LOS MAYAS
La etnia maya de los mopanes cuenta que las libélulas ayudaron al sol a guardar en trece troncos huecos los trozos rotos de la Luna, que fue descuartizada por un rayo.
Cuando los troncos fueron abiertos por un perro, surgieron sobre el mundo todos los animales nocivos como las serpientes.
El pueblo tzotzil en Chiapas aprecia las libélulas por sus dones curativos. Suelen pasar tres de estos odonatos por la boca de los niños cuando babean. De esta forma los pequeños no vuelven a salivar en exceso.
En Quintana Roo el sambay macho o dzabay, uno de los bailes más característicos legado por los prehispánicos de la zona, representa la exhibición de vuelo especial que hace la libélula macho para cortejar a la hembra.

OTROS SIMBOLISMOS POSITIVOS

Para la gente adulta de Tahití son agentes misteriosos de los dioses y espíritus. 

en Escandinavia se consideran animales santos.

La mitología hindú señala que cuando las personas mueren sus almas se transforman en libélulas que esperan en la Naturaleza hasta renacer en otra persona.

SIMBOLISMOS NEGATIVOS
En algunas regiones de Suecia se cree que si una libélula vuela alrededor de la cabeza de una persona, ésta sufrirá una herida como castigo y su alma se hará más pesada.

En Filipinas, se considera que si una libélula se posa en el cabello de un ser humano, éste comenzará a presentar signos de locura.

En determinadas poblaciones de Estados Unidos se tienen la superstición de que las libélulas cosen la boca -y algunas veces los ojos y los oídos- de los niños mentirosos.

Para los indios Dakota y en algunos sitios de Italia, Irlanda y Escocia son vistas como brujas que viven en el bosque.

La libélula, en casi todas partes del mundo, simboliza el cambio en la perspectiva de la autorrealización, y el cambio tiene su origen en la madurez mental y emocional y la comprensión del significado más profundo de la vida.

La tradicional asociación de libélulas con el agua también da origen al significado de este increíble insecto
El vuelo de la libélula corriendo a través del agua representa un acto de ir más allá de lo que está en la superficie y busca en las implicaciones más profundas y los aspectos de la vida.


Poder y Equilibrio.  
El vuelo ágil de la libélula y su capacidad para moverse en todas las direcciones exuda una sensación de poder y equilibrio, algo que sólo viene con la edad y madurez.

La libélula puede moverse a sorprendentes 45 millas por hora como un helicóptero, volar hacia atrás como un colibrí, volar en línea recta hacia arriba, abajo y a los lados lo que es alucinante es el hecho de que puede hacer esto mientras que bate sus alas a sólo 30 veces por minuto, mientras que los mosquitos y las moscas tienen la necesidad de batir sus alas 600 y 1.000 veces por minuto, respectivamente. El aspecto imponente es como la libélula cumple sus objetivos con la máxima simplicidad, efectividad y así, si nos fijamos en las proporciones, con 20 veces más potencia en cada uno de sus golpes de ala, en comparación con los otros insectos. La mejor parte es que la libélula lo hace con elegancia y gracia que se puede comparar con un bailarín de ballet veterano.

Derrota de las ilusiones creadas
Son iridiscentes tanto en sus alas, así como en su cuerpo. 
- Iridiscencia es propiedad de un objeto a manifestarse en diferentes colores dependiendo del ángulo y la polarización de la luz que cae sobre él.-
Esta propiedad se ve y se cree que es el final de las ilusiones auto creadas y una visión clara de las realidades de la vida. 
La propiedad mágica de iridiscencia también se asocia con el descubrimiento de las propias capacidades al desenmascarar el verdadero yo y la eliminación de las dudas. De nuevo, esto significa indirectamente auto-descubrimiento y la eliminación de las inhibiciones.

Enfoque sobre la vida
La libélula vive normalmente la mayor parte de su vida como una ninfa o un inmaduro. 

Vuela sólo en una fracción de su vida y por lo general no más de unos pocos meses. Esta libélula adulta lo hace todo en estos meses y no deja nada que desear.

Este estilo de vida simboliza y ejemplifica la virtud de vivir en el momento y vivir la vida al máximo. Al vivir en el momento en que es consciente de quién es, dónde está, lo que está haciendo, lo que quiere, y tomar decisiones basadas a partir del momento presente. Esta capacidad le permite vivir su vida sin remordimientos como libélula adulta

La apertura de los ojos
Los ojos de la libélula es una de las partes 
más interesantes y más sorprendentes. 


Casi el 80% de la potencia del cerebro del insecto se dedica a la vista y el hecho de que puede ver en los 360 grados alrededor de él, simboliza la visión desinhibida de la mente y la capacidad de ver más allá de las limitaciones impuestas por esta.


¿Qué significado tiene encontrarse una libélula en la casa?
La libélula en la tradición de las tribus Indígenas de norteamericanas significa: ilusión. Algunas de las leyendas dicen que la libélula fu e una vez dragón. 

El dragón estaba lleno de sabiduría y se desplazaba por la noche trayendo luz con su con su fiero aliento. El aliento del dragón traía arte y magia y sobre todo la ilusión de la forma cambiante. 

El dragón fue atrapado en su propia fachada. El Coyote le pidió al dragón que con su magia cambiara de forma y la forma que adoptó su cuerpo fue el de la Libélula, al aceptar ese desafío de probar su poder y su valor mágico, el dragón perdió su poder.

Cuando una libélula aparece frente a ti significa que ella es portadora de los vientos de cambio los mensajes de sabiduría, esto quiere decir que estés atento a no acabar con las ilusiones que has tenido y las que limitan tus acciones o ideas. 

¿Has intentado hacer cambios en tu vida y no has podido?  Piénsalo!

La Libélula personifica el deshacerse de todas las creencias que dicen: 
no podemos hacer esto o aquello, alcanzar un sueño o una meta
La libélula está para recordarnos que todo es posible cuando realmente alcanzamos el entendimiento de que somos parte del universo y que estamos "EN" el cuerpo 

- Nuestro espíritu que es lo que somos, utilizando el cuerpo por un tiempo, mientras dure la vida- y como tales tenemos el poder de manifestar lo que sea que decidamos en nuestro cuerpo y vida.

La Libélula es el guardián de los sueños, el conocedor interior que ve todo nuestro potencial verdadero, así como nuestras habilidades. 

La Libélula tira fuera las ilusiones que nos dicen que no podemos alcanzar nuestros sueños y metas, que no somos valiosos o capaces, cuando en realidad es nuestro derecho de nacimiento y nuestro verdadero poder crear cualquier cosa que elijamos.

LAS LIBÉLULAS Y LOS COLORES

La libélula también nos conecta con el poder de los colores y la habilidad de trabajar con varios colores diferentes para alcanzar cualquier cosa que queramos experimentar en la vida.

Podemos comenzar viendo los colores que usamos por medio de nuestra ropa, los colores con los que llenamos nuestro hogar, incluso el color del auto que conducimos impactan en nosotros para bien o para mal.

Si continuamente usamos colores apagados y pardos mientras pedimos más aventura y entusiasmo en la vida, en realidad estamos enviando el mensaje de que en verdad no queremos lo que estamos pidiendo.

El color con que nos rodeamos establece una vibración que atrae circunstancias y energías que nos reflejan los mensajes que estamos enviando adelante.

Si queremos cambios tenemos que afirmar que estamos listos y dispuestos para los cambios que deseamos ocurran, por medio del uso de las vibraciones de color que corresponde a la energía que buscamos vivenciar.

Si uno quiere ser mejor reconocido por el trabajo que ama hacer, entonces debe usar tonos de rojo o violeta, que ayudarán a lograrlo. Para nuevos comienzos, probar usar tonos de verde. Para sentirse más poderoso usar tonos amarillos. Para sentirse más profundamente conectado con el universo y para desarrollar grandes habilidades intuitivas, todos los tonos de azul e índigo son excelentes. 


El color es una herramienta valiosa para expresar quienes somos, quienes queremos ser y qué deseamos vivenciar en nuestras vidas. 

Echa un vistazo al mundo a tú alrededor: todo en la naturaleza pone adelante su propósito y solicitud por medio del uso de un vasto rango de colores.

Una flor atraerá a un polinizador por medio de sus colores. 

Por medio de los colores que despliega sobre su cuerpo, una rana de los árboles pondrá sobre aviso a los predadores que no es buena idea comerla. 

Un león atrae a su compañera por el color de su melena.

Trabajando con la Libélula puede enseñarnos también cómo usar los colores para atraer lo que deseamos, o al menos para comprender qué mensajes tendemos delante por medio de los colores que usamos.

La gente que lleva consigo la medicina de la libélula es con frecuencia talentosa en el uso del color para sanar. 

Puede ver o sentir los colores que un individuo lleva en su aura y puede aprender cómo ayudar a la persona a ajustar los rayos de colores, y así volverse más partícipe de su propio proceso de sanación, más que relegando en alguien más hacer la sanación para él (¡que nunca funciona!). 

Por ejemplo, si alguien lleva un color rojo pesado y oscuro en su aura que puede conducir a pérdida de poder o fuerza, constantes irritaciones con otros o las cosas siempre yendo mal, la persona "libélula" puede ayudarla con los rojos limpios que son más fortificantes en términos de vivir con confianza pero sin el chip en el hombro que suplica por alguien que venga y lo golpee y agreda. 

Si alguien tiene un aura que parece estar desprovista de energía vital y color, la persona "libélula" puede ayudarla a aprender a trabajar pintando con todos los colores del Universo, ambos, los que se ven y los invisibles al ojo humano, para reparar y vigorizar el aura. 

Simplemente haciendo esto: comenzando por enfocar en todos los colores del aro iris y visualizándolos entrando en el aura por medio de la corriente universal. 


Pueden ser expandidos pidiéndolo, incluso aquellos que cuyos ojos aun no están preparados para percibir el aura.

El color es parte de la “comida” que el aura necesita para mantenerse fuerte y saludable, entonces haciendo esto algunas veces a la semana o cada día, puede ser muy vivificante.

La gente libélula es también muy talentosa ayudando a otras personas a navegar en sus propias aguas emocionales. 

¿Cuán frecuentemente hemos oído decir a alguien que “se sienten azul” o “cosquillosamente rosado”? Nuestras emociones tienen colores, igual que nuestro mundo está lleno de color. 

Notando qué colores a uno lo atraen por determinado tiempo, uno también puede desmenuzar con más precisión qué emociones están realmente corriendo la vida en ese período. 

Debido a que nos convertimos en personas que nos aclimatamos a los sentimientos de una determinada manera, no nos damos verdaderamente cuenta de que estamos depresivos, sintiendo un bajo nivel de bronca u hostilidad, o estamos sobre una pena constante sobre un hecho que ocurrió muchos años atrás. O bien podemos estar proyectando aquellas emociones hacia otros y quejándonos porque estamos siempre atrayendo gente que es depresiva u hostil. 

La energía y gente libélula pueden ayudarnos a estar más en contacto con las emociones que sentimos pero ignoramos, nuestras maneras de sentir que se convirtieron en muy conocidas para nosotros, pero que no hemos manifestado, y siguen allí esperando salir a la luz. 

Nuestras emociones impactan en los colores de nuestra aura, y teniendo una persona libélula que haga una mirada cercana a esos colores puede ayudarnos a liberar cualquier energía que no nos beneficia, mientras aprendemos cómo incorporar más de los colores que darán mejores servicios. 

Una vez que podemos darle nombre a algo, entonces comienza el proceso de búsqueda de herramientas que nos ayudarán a sanar y a movernos de ahí.


En nuestra cultura las emociones no son “lindas”, no somos alentados a sentir el amplio rango de emociones que tenemos la bendición de experimentar en el cuerpo físico y muy a menudo la energía queda atrapada o encajonada, especialmente en los chakras inferiores. 

Trabajando con la energía libélula, llamándola a estos chakras (donde mucha de esta energía es especialmente atrapada y luego manifestada por el cuerpo en forma de dolor y enfermedad) puede ayudar a impulsarla hacia arriba y llevarla a que se mueva otra vez. 
Esta no tiene que ser tan dolorosa como uno teme y siempre es menos molesto que tener a esa energía constantemente atrayendo más de lo mismo por medio de su vibración. Para trabajar con esto, si tú no conoce a una persona libélula que te ayude en el proceso, simplemente debes llamar a la energía libélula por medio de la mente; basta con pensar solamente en ella. 
Seguidamente visualizas a la Libélula moviéndose por tus chackas inferiores, infundiéndolos con colores claros y brillantes, los más amorosos que puedas imaginar. 

El orden es el mismo que el de los colores del arco iris: rojo, anaranjado, amarillo, verde, azul, violeta e índigo. Si comienzas a sentirte emotiv@, sigue con el proceso. Generalmente no le toma mucho tiempo a esta energía para realizar la limpieza, y sentirás ganas de expresar esas emociones. Llora, grita, patalea, has lo que sea necesario para sacar esas emociones, y sostén en tu mente que tienes un aliado poderoso trabajando internamente contigo que te ayudará a sostenerte durante el proceso. 

Si de todos modos te sientes temeroso o crees que “lo debes dejar”, contáctate con otro terapeuta o sanador antes de interesarte en cualquiera de estos tipos de sanación. 

Es una gran señal verdadera y poderosa saber que todos necesitamos ayuda de tanto en tanto. La gente libélula con frecuencia asiste con cristales que tienen “arco iris” dentro, o con piedras que son brillantemente coloreadas, especialmente los claros y brillantes. Acentuar los colores de la propia casa puede realmente elevar el espíritu de la gente libélula, especialmente si han estado haciendo mucho trabajo de sanación en ellos mismos u otros.

La Libélula también nos enseña cómo combinar emoción con pensamiento racional. 
La Libélula, en su estado inicial, es conocida como ninfa y pasa mucho de su vida en el agua. 


Es una voraz predadora que indica que la Libélula puede también ayudarnos a deshacernos de todo aquello en nuestras vidas que está fuera de control. 

Es especialmente buena en adicciones de toda índole, incluidas las bien conocidas como: gula, beber en exceso y drogas. 

La continua postergación, ser mano rota, llevar las tarjetas al límite, soñar despierto, trabajar demasiado y más, pueden ser adicciones que nos roban la habilidad de crear una vida balanceada y plena. 

Aunque no todas son adicciones, sí existen para suprimir energías emocionales y traumas que se ven compensadas por medio de la adicción. 

La gula, por ejemplo, puede buscarse como una “medicina” por sentirse no querido. 
El alcoholismo, para huir de la depresión. 

Cuando aparece la libélula puede indicar que hay adicciones u otros problemas que están “fuera de control” en tu vida que deben ser examinados y resueltos. 

Con frecuencia, el asunto principal no siempre es lo que parece ser en la superficie, es importante mirar con atención bajo las aguas emocionales para comprender lo que realmente está pasando. 

Una vez que la Libélula ha surgido como individuo adulto con alas, ésta conquista el aire con su vuelo súbito. Nos indica que trabajando con la energía de la libélula ella podrá ayudarnos a llegar a rápidas conclusiones o nueva perspicacia que nos ayudan a empujarnos en nuevas maneras de ser y de hacer. 

Ciertamente, es el tiempo más importante para ver a través de las ilusiones y realmente escuchar los mensajes que el universo está enviando en este momento. Creencias centradas en la limitación o el miedo son expuestas para ser revisadas y soltadas. 

Tú siempre tienes el poder de elegir qué es lo que vas a creer y enfocado en ti, siempre tiene el poder de actuar de alguna manera que ayudará a cambiar para mejor tus circunstancias corrientes. 

Trabajando con la medicina de la Libélula muestras que tú estás un paso más allá del pensamiento popular, culpando “algo allá fuera” por tus problemas, que en cambio son ahora colocados al nivel de aceptar la responsabilidad total de lo que pasa en tu vida, tomando la decisión apropiada, sintiéndote guiado.

Cuando aparece la Libélula estate listo para la transformación. 


Es un largo ciclo que puede tomar más de dos años pero el trabajo y el esfuerzo darán sus buenos frutos al final. 

Sentirás cada tanto como si estuvieras en la senda de fuego a través de la vida (para algunas culturas, las libélulas son mini dragones) entonces lo que emerja de dentro de ti es un sentido de tu propio poder y confianza en el poder superior que nadie podrá arrebatarte de él. 


Estás en el proceso de saber y comprender quien verdaderamente eres, conectándote con la vasta fuente de poder y energía que te fue dado por el Espíritu en el momento que tu alma vino a ser. 

Este poder ha crecido dentro de ti mientras has viajado a través del tiempo y el espacio. 

Ahora es el tiempo de ser encumbrado como propio, así que debes dar el paso adelante renovado como poder del alma que viniste a expresar en este andar por la tierra.


✿❥━zaidAzul ♥ღƪ(ˆ◡ˆ)ʃ✽♥

miércoles, 19 de junio de 2013

El encuentro con inocentes. Por: Rabindranath Tagore

  • ¿De dónde he venido?
    ¿De dónde me tomaste?
    Esto preguntó el bebé a la madre.
    Ella respondió
    un poco llorando
    un poco riendo
    y apretando
    a su hijo
    contra el pecho:
    Estabas escondido en mi corazón
    como  un deseo mi cielo.
    Estabas en mis juegos infantiles de muñecas
    y luego con arcilla
    modelé la imagen de mi Dios cada mañana,
    te hice y te deshice en ese momento.
    Estabas en el vientre de nuestra divinidad hogareña
    y al adorarla
    te adoraba a tí.
    En mis esperanzas y amores
    en mi vida
    y en la vida de mi madre
    haz vivido tú.
    En el cuenco espiritual de nuestro hogar
    fuiste cuidado por siglos
    y cuando en mi juventud
    mi corazón abrió sus pétalos
    ya rondabas
    como una fragancia.

    Tú ternura floreció
    en mi juvenil esencia
    como un resplandor en el cielo,
    como  un amanecer.
    El primogénito querido del cielo
    me guió a la luz de la mañana.
    Haz flotado
    por la corriente de la vida del mundo
    y finalmente
    te quedaste en mi corazón.
    Contemplo tu rostro
    y el misterio me invade.
    Tú que a todos perteneces
    ahora eres mío
    y por miedo a perderte
    te abrazo contra mi pecho.
    ¿Qué magia,
    ha atrapado el tesoro del mundo
    en estas manos mías?

    - Rabindranath Tagore -